"La inspiración es como una mariposita ciega y sorda, pero muy luminosa"

viernes, 26 de febrero de 2010

Los ronaldos para IKEA

Me encanta esta canción. La primera vez que la escuché fue en Daluxe la noche de fin de año y me pareció una horterada. (Tengo que puntualizar que escuché la versión de El Canto del Loco, con el consiguiente rechazo que me provocan en este momento de mi existencia, porque de pequeña bien que iba a sus conciertos).
Estaba comiendo el otro día cuando el anuncio de IKEA me obligó a dedicarle toda mi atención. Busqué la canción que, tras escucharla, me emocionó.
Ahí me paré a reflexionar a qué venía ese empeño mío en repeler todo lo que suena a romántico (con lo que yo he sido), el porqué esa manía mía de ver la demostración de amor como un signo de debilidad, de dependencia del otro, de necesidad, de incapacidad de funcionar por uno mismo como ser independiente,... (repito, con lo que yo he sido!!!).




Proximamente... la salvaje fiesta Larios!!!

domingo, 21 de febrero de 2010

Inspiraciones ajenas

El otro día leí una frase en un blog que me resultó sumamente inspiradora: "Escribir es como la vida. Y la vida como escribir".
Escribir es desnudarte, como si las letras que encadenas fueran prendas de ropa de las que vas despojándote. Sabes que la situación te va haciendo más vulnerable, pero te da igual porque es catárquico. Te permite revelar todo aquello que se aloja en lo más visceral de tu cuerpo, sacarlo, mostrarlo, escupirlo. No buscas un interlocutor, un confidente, un cómplice. Hay quienes no conocemos otra manera de exhortizar la rabia, la frustación, la debilidad, la incredulidad. Los reveses en la vida se suceden y hay quienes no sabemos canalizarlos de otra manera que no sea escribiendo de ellos. Analizarlos. Psicoanalizarlos.

sábado, 13 de febrero de 2010

A single man

Esta va a ser una de las veces que escribo en estado de euforia. Por ello tengo derecho a exagerar todas mis percepciones y opiniones, porque en este momento lo siento como tal. Y esto es algo que me pasa en la mayoría de las ocasiones inmediatamente después de ver una película (qué tendrá el cine que me llega tan adentro?!)

Llevaba unos días pensando en la película de Tom Ford (sí, sí, el diseñador metido a director de cine) y a lo largo de esta semana tanta promoción en la tele española con Kortajarena como reclamo publicitario casi acaban con mis ganas de verla.

Pero finalmente la curiosidad venció y acabé por disfrutarla.
Deliciosa película con un cuidado escrupuloso de los detalles y de los planos que la convierten en una joya visual. La delicadeza con la que relata el universo "de los invisibles", el cuerpo desnudo contorneándose en el agua cómplice, la espiral sin retorno de la imposibilidad de olvidar lo inolvidable, el terror al paso del tiempo, ..., pero sin duda "el miedo a quedarse solo", que se convierte en el verdadero villano de la historia.

Sonido de un incesante metrónomo (de esos que me encantan) como sinfonía para una jornada en la agria vida del protagonista, en la que pasea vertiginosamente por los momentos más dulces de su existencia. Y un triste broche para melodramáticos, en el que el metrónomo deja de marcar el tempo.

No es por caer en topicazos, pero si Ford era bueno en la moda, no se queda corto en el cine. Puede que no vaya a ser una obra cumbre del séptimo arte, pero es un filme que no pasa desapercibido, con una fotografía y una banda sonora que dejan sin aliento. Como sus protas, que se comen la pantalla a bocados. Y desde aquí hago apología para que Colin Firth se lleve el OSCAR!!!

TRAILER



BSO